Soltar, y entonces ?

                                 

En esta casita de madera en la montaña, estuvimos con las nenas, abuela, y tía C...es uno de los recuerdos más lindos que ha hechado raíces en mi cuerpo. Son las 4 de la madrugada y como siempre sigo insomne. Margarita duerme al lado mío.....si, me dieron algo para dormir pero no estaría funcionando, los resultados son estas líneas que arrancan solas sin un objetivo preciso.Se me cae el pelo, esta enfermedad, el trabajo y mi familia, abogados incluidos me están matando. El pais y la gente están mal, la inflación arrasa con todo como la ola de un tsunami. Ayer cuando volvía a casa en Cabify, de retiro, Av de los inmigrantes 1950, En la radio se escuchaba a Beto Cassella hablar de la inesperada caída de Sergio Dennis, apenas pisó un escalón para subir a un escenario a cantar. Estoy en esa edad en la que uno ve una realidad inesperada que lo lleva a lidiar con adolescentes feroces e hirientes y padres que se transforman en bebés, usan andador pero no de juguete, a los qué hay que llevar al baño, limpiar y duchar sentados en una sillita, con uno de esos duchadores extraibles, como auténticas criaturas....y entonces uno primero se asusta, como si hubiese perdido el control del auto, e hiciera lo que nunca hay que hacer, frenar, con suerte se va a la banquina, el auto se da vuelta y uno producto del azar, sale apenas con uno que otro corte o magullón. Como decía un jefe que tuve, la fatalidad luce sus medallas. Entonces ese hado...ese contratiempo siniestro producto del destino,
      termina por definirlo a uno, como un gallina miedosa o como un duro a lo Clint eastwood, bien plantado y con buenos remates : “ El mundo se divide en dos categorías : “Los que tienen el revólver cargado y los que cavan” .... En este momento, estaría cavando una fosa del tamaño en la que se cayó el buenazo de Sergio Dennis.